29 Abril 2017
*Llamado de Amor y de Conversión del Corazón Doloroso e Inmaculado de María*
Mis queridos hijos, deseo, como Madre, tocar sus corazones y abrigarlos con Mi Corazón Inmaculado, para que sientan el calor de la Madre, el amor de su Madre, y Mi Protección Maternal. La frialdad, la dureza y el egoísmo del mundo, hieren sus corazones, más, Yo, como Madre, con Mi Amor Maternal vengo a ayudarles a que conozcan el Amor de Dios y a proteger a Mis pequeños, porque soy vuestra Madre. Queridos hijos, pero, para que sus corazones estén abiertos a la Gracia deben desvaciarse de ustedes mismos, deben desvaciarse de las aguas del mundo, para que tengan espacio, para llenarse de las Aguas de la Gracia y del Santuario de Dios. Pequeños, recuerden que lo que hace impuros sus corazones es lo que nace del corazón humano: el odio, el rencor, los deseos pecaminosos, el rechazo, los celos, la envidia; en una palabra, queridos hijos, del corazón del hombre que vive sin Dios sólo nacerá el no-amor, el no amar a Dios, y como no se ama al Amor no se amará a ninguna creatura. Pequeños, vigilen sus corazones, para que no nazca un sentimiento que los haga impuros, sino que estén vigilantes, orantes y atentos. Porque recuerden, hijos Míos, que el Amor es el que los salvará y en la caridad serán examinados, porque en todo esto se resume la Ley de Dios: amar a Dios y amar al prójimo. Éstos Dos Mandatos, que son uno solo, si los viven con todo el corazón les darán la salvación que Mi Hijo les promete, y así en el Amor tengan corazones puros. Yo les amo, les bendigo con amor maternal: en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.