"La Obra de la Cruz crecerá, será un árbol frondoso en mi Iglesia, producirá muchos frutos de salvación que darán gloria a la Trinidad"
| La Beata Concepción Cabrera de Armida (1863-1937), mujer laica, casada y madre de nueve hijos fue escogida por Dios como instrumento para comunicar la Espiritualidad de la Cruz y establecer la Obra de la Cruz. Con su vida y sus escritos, Conchita dio un impulso decisivo a cada una de las ramas de la Obra. La Obra de la Cruz fue suscitada en la Iglesia para promover la santidad del pueblo de Dios en el seguimiento de Cristo, Sacerdote y Víctima, contemplativo y solidario.
Apostolado de la Cruz
El Apostolado de la Cruz es la primera rama de la Obra de la Cruz. Fue inspirada por Dios a la Beata Concepción Cabrera; fundada el 3 de mayo de 1895, en la República Mexicana, por el Venerable Ramón Ibarra González, entonces Obispo de Chilapa, Guerrero.
Se caracteriza por estar abierta a todos los fieles cristianos que forman el pueblo de Dios: laicos, religiosos y sacerdotes, que buscan vivir su consagración bautismal según la Espiritualidad de la Cruz, para responder así, a la vocación universal a la santidad.
Religiosas de la Cruz del Sagrado Corazón de Jesús
Las Religiosas de la Cruz del Sagrado Corazón de Jesús son consagradas contemplativas. Esta es la rama del árbol de la Cruz que se eleva por encima, debido a que su característica es la oración contemplativa. Fueron fundadas el 3 de mayo de 1897 en la Ciudad de México.
Las Religiosas de la Cruz dedican su vida a la adoración perpetua al Santísimo Sacramento y voluntariamente se ofrecen en favor de la santificación de los sacerdotes.
Alianza de Amor con el Sagrado Corazón de Jesús La tercera rama de la Obra de la Cruz, específicamente para laicos, fue fundada el 8 de noviembre de 1909. Los miembros de la Alianza de Amor con el Sagrado Corazón de Jesús son llamados a consagrarse al Padre en unión con Cristo, Sacerdote y Víctima, en un constante ofrecimiento de su vida seglar.
Sus miembros buscan dar consuelo al Corazón de Jesús a través de una vida de intimidad con El, que les permitirá conocer y participar de sus dolores internos.
Fraternidad de Cristo Sacerdote La Fraternidad de Cristo Sacerdote, para obispos, sacerdotes y diáconos, fue fundada el 19 de enero de 1912.
La Fraternidad de Cristo Sacerdote une a sus miembros, quienes bajo la acción del Espíritu Santo viven su experiencia de fe en comunión eclesial con el Espíritu de Cristo, Sacerdote y Víctima, en busca de su propia santificación y la santificación del pueblo sacerdotal.
Misioneros del Espíritu Santo
Los Misioneros del Espíritu Santo fueron fundados el 25 de diciembre de 1914 en la Ciudad de México por el P. Félix de Jesús Rougier, M.Sp.S. Aunque históricamente es la última rama del árbol, es la que anima todas las Obras de la Cruz.
Los Misioneros del Espíritu Santo, sacerdotes, diáconos y hermanos coadjutores, viven y comparten en comunidad la Espiritualidad de la Cruz en su total consagración a través de sus votos religiosos y acción apostólica.
El Misionero del Espíritu Santo vive su espiritualidad sacerdotal ofreciendo al Padre su Hijo, Sacerdote y Víctima y ofreciéndose con El como hostia agradable a Dios.
Su misión es la misma de Jesús, que fue enviado para salvarnos y santificarnos por el don de su Espíritu. Como apóstoles del Espíritu Santo son enviados a promover la santidad en todo el pueblo de Dios de acuerdo a la Espiritualidad de la Cruz. Los sacerdotes toman lugar preferencial en la acción apostólica de los Misioneros del Espíritu Santo.
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| Un árbol de cinco ramas
Apostolado de la Cruz Religiosas de la Cruz del Sagrado Corazón de Jesús Alianza de Amor Fraternidad de Cristo Sacerdote Misioneros del Espíritu Santo
Familia de la Cruz
Dios ha suscitado en la Iglesia instituciones diversas que viven y difunden el espíritu de Cristo Sacerdote y Víctima, y constituyen la "Familia de la Cruz". Forman el núcleo central las Obras de la Cruz, que se extienden a todo el Pueblo de Dios. "Aunque son cinco, no forman en realidad sino una sola, una Obra de amor y sacrificio". Con el reconocimiento propio, pertenecen también a esta Familia otras obras que nacieron del celo apostólico de nuestros Padres en el espíritu, y diversas instituciones que, animadas por la Espiritualidad de la Cruz, realizan distintas misiones. Esta Familia de la Cruz vive y se desarrolla bajo el impulso del Espíritu Santo para continuar, a través del tiempo y del espacio, el clamor de intercesión que fue su origen: ¡Jesús, Salvador de los hombres, Sálvalos! (Misioneros del Espíritu Santo, Constitución Fundamental, Art.7.) El carisma fundacional del P. Félix Rougier lo heredaron algunos Misioneros del Espíritu Santo y se han ido multiplicando las Instituciones. Integrando a las cinco Obras de la Cruz, somos 18 Instituciones las que actualmente formamos la Familia de la Cruz. Vivimos la Espiritualidad de la Cruz a través del Sacerdocio Bautismal: Por la acción del Espíritu Santo, en unión con Cristo, con María y como María, nos ofrecemos al Padre, por la santificación de los sacerdotes y por la salvación de la humanidad, para hacerla una ofrenda grata a Dios (G.S 78).
Esta vivencia la llamamos "Cadena de Amor".
Institutos Religiosos
Hijas del Espíritu Santo Misioneras Guadalupanas del Espíritu Santo Misioneras de Jesús Hostia Misioneras de la Acción Católica de la Inmaculada Concepción Misioneras de la Caridad de María Inmaculada Misioneras Eucarísticas de la Santísima Trinidad Misioneras de Jesús Sacerdote Misioneras de la Veracruz Hijas de la Iglesia Oblatas de Jesús Sacerdote Oblatas de Santa Marta Oblatas Eucarísticas de la Soledad de María Hermanos de la Cruz (Rama masculina contemplativa) CEC - Círculo del Espíritu Santo y de la Cruz
Oración por vocaciones por la Familia de la Cruz
Padre bueno, te ofrecemos a Jesús, tu Hijo, y te pedimos, por intercesión de san José, que suscites abundantes vocaciones para la Familia de la Cruz, que vivan su Espiritualidad, y se comprometan en la vida laical, religiosa o sacerdotal a colaborar en la salvación del mundo. Jesús, Salvador de los hombres, ¡sálvalos! |
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