Mensaje del Cielo para el Apostolado de los Sagrados Corazones Unidos de Jesús y de María
27 Junio 2016
Llamado de Amor y Conversión de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro:
Queridos hijos, Mi Corazón Inmaculado es vuestro refugio; todas vuestras oraciones y súplicas háganlas también por intercesión de Mi Inmaculado Corazón. Mi Inmaculado Corazón es vuestro socorro y es perpetuo, porque Su intercesión nunca acabará, siempre Estoy intercediendo por todos Mis hijos, para que crean, para que se conviertan, para que vivan en paz. Bajo Mi Manto Inmaculado serán protegidos del mundo, el demonio y el pecado. Hijitos, invoquen siempre Mi ayuda; Yo Soy la Omnipotente Súplica que como Corredentora viene a socorrerlos de la maldad de los corazones que aún no ven la Luz de la Palabra de Mi Hijo; mas ustedes, pequeños, con Mi intercesión conviértanse en luz, en testimonio; sean la imagen de nuestros Dos Corazones para los demás; den testimonio con vuestras vidas y no tengan miedo de glorificar al Señor con vuestro testimonio y ejemplo, porque Yo socorreré a Mi hijos en cada una de sus necesidades, pero tengan fe, paciencia y fortaleza. Mi Hijo siempre actúa en sus vidas, pero en el momento adecuado según la Divina Voluntad de Mi Hijo. Oren, pidan fe; Yo estoy con ustedes y les prometo Mi auxilio durante vuestra vida terrena. Yo les amo y les bendigo. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Mi Hijo Jesús, en sus brazos, los lleva a todos en su Sagrado Corazón; glorifiquen siempre al Señor.
- E senti o espírito inundado por um mistério de luz que é Deus e N´Ele vi e ouvi -A ponta da lança como chama que se desprende, toca o eixo da terra, – Ela estremece: montanhas, cidades, vilas e aldeias com os seus moradores são sepultados. - O mar, os rios e as nuvens saem dos seus limites, transbordam, inundam e arrastam consigo num redemoinho, moradias e gente em número que não se pode contar , é a purificação do mundo pelo pecado em que se mergulha. - O ódio, a ambição provocam a guerra destruidora! - Depois senti no palpitar acelerado do coração e no meu espírito o eco duma voz suave que dizia: – No tempo, uma só Fé, um só Batismo, uma só Igreja, Santa, Católica, Apostólica: - Na eternidade, o Céu! (escreve a irmã Lúcia a 3 de janeiro de 1944, em "O Meu Caminho," I, p. 158 – 160 – Carmelo de Coimbra)