De la Conmemoración de los Fieles Difuntos
214. ¿Por que después dé la fiesta de Todos los Santos
hace la Iglesia conmemoración de todos los fieles difuntos?
Después de la fiesta de Todos los Santos hace la Iglesia
conmemoración de. todos los fieles difuntos, que están en el purgatorio, porque
conviene que la Iglesia militante, después de haber honrado e invocado con una
fiesta general y solemne el patrocinio de la Iglesia triunfante, acuda al alivio
de la Iglesia purgante con un general y solemne sufragio.
215. ¿Cómo podemos aliviar a las almas de los fieles
difuntos? Podemos aliviar a las almas de los fieles difuntos con
oraciones, limosnas y con todas las demás obras buenas, pero sobre todo con el
santo sacrificio de la Misa.
216. ¿Por qué almas hemos de aplicar nuestros sufragios
el día de la Conmemoración de los fieles difuntos, según la mente de la
Iglesia? En la Conmemoración de todos los fieles difuntos hemos de
aplicar nuestros sufragios, no sólo por las almas de nuestros padres, amigos y
bienhechores, sino también por todas las otras que están en el purgatorio.
217. ¿Qué fruto hemos de sacar de la Conmemoración de
todos los fieles difuntos?
De la Conmemoración de todos los fieles difuntos hemos de sacar
este fruto:
1º, pensar que también nosotros hemos de morir presto y
presentarnos al tribunal de Dios para darle cuenta de toda nuestra vida;
2º, concebir un gran horror al pecado, considerando cuán
rigurosamente lo castiga Dios en la otra vida, y satisfacer en ésta a la
justicia divina con obras de penitencia por, los pecados cometidos.
Catecismo Mayor de San Pio X.
http://instrumentoscristianos.blogspot.pt/

inundado por um mistério de luz que é Deus e N´Ele vi e ouvi -A ponta da lança como chama que se desprende, toca o eixo da terra, – Ela estremece: montanhas, cidades, vilas e aldeias com os seus moradores são sepultados. - O mar, os rios e as nuvens saem dos seus limites, transbordam, inundam e arrastam consigo num redemoinho, moradias e gente em número que não se pode contar , é a purificação do mundo pelo pecado em que se mergulha. - O ódio, a ambição provocam a guerra destruidora! - Depois senti no palpitar acelerado do coração e no meu espírito o eco duma voz suave que dizia: – No tempo, uma só Fé, um só Batismo, uma só Igreja, Santa, Católica, Apostólica: - Na eternidade, o Céu!