quinta-feira, 20 de julho de 2023

La crisis de fe que atraviesa la Iglesia tiene su origen en la nueva Misa

 

Este imperdible artículo del sacerdote austriaco Michael Gurtner se publicó originalmente en alemán en el sitio katholisches.info el pasado 27 de noviembre, que ha autorizado a Rorate Caeli a publicar la traducción. En estos momentos la Iglesia modernista trata de transformar su constitución interna, transformándose por sí sola y por iniciativa...
Hace once años, en 2011, en RORATE tuvimos el orgullo de ser los primeros en poner en línea, por primera vez, un documento que entonces se había vuelto extremadamente raro: la primerísima IGMR (Instrucción General del Misal Romano), publicada junto con el Novus Ordo Missae de 1969.De nuestro artículo: 7....
La Jerarquía alemana, con su revolucionario "Camino Sinodal", está liderando el asalto para destruir la unidad católica. ¿Qué mejor manera de fomentar esto que el Papa eleve a uno de sus obispos a la posición doctrinal más prominente de la Iglesia? Y esto podría ocurrir muy pronto, según las más...

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terça-feira, 18 de julho de 2023

El fracaso de Traditionis Custodes


El fracaso de Traditionis Custodes

 

Misa de ordenaciones sacerdotales de la FSSP, 11 de junio de 2023.

Una certeza recorre los medios de comunicación católicos ya no sólo tradicionalistas: Traditionis custodes ha fracasado, y el último tentativo realizado por los ideólogos setentistas para detener la proliferación de la misa tradicional, sobre todo entre los jóvenes, se ha revelado inútil. Esta afirmación no es un enunciado voluntarista; es la constatación de hechos que puede realizar cualquier persona con honestidad intelectual. La Croix es un diario católico francés, órgano oficioso de la Conferencia Episcopal de ese país y para nada sospechoso de ser tradicionalista. Allí escribía hace pocos días Jean Bernard: «La pregunta ya no es si el misal de 1969 reemplazará definitivamente la Misa tradicional o cuándo lo hará. Como lo confirman claramente los resultados de la encuestaencargada por La Croix sobre las orientaciones de los jóvenes católicos en Francia, no sólo no desaparecerá la Misa tradicional, sino que todo hace pensar que seguirá creciendo, no sólo en términos absolutos sino sobre todo en términos relativos, dado el desgaste progresivo de algunas parroquias de rito ordinario».

Tucho Fernández hizo sus primeras declaraciones como prefecto electo. Y creo que yo que estas declaraciones serían motivo suficiente para anular el nombramiento.

Las primeras declaraciones del prefecto

 


¿Grotesco? ¿Desopilante? ¿Absurdo? Son estos vocablos y otros más los que me vienen a la mente a la hora de pensar en el nombramiento y en el nombrado. Me ha tranquilizado saber que esta inquietud no me afecta sólo a mi. Es cuestión de ver los artículos aparecidos en la blogósfera mundial sobre el tema, y los comentarios y conversaciones que he tenido con amigos y conocidos de varias partes del mundo. Todos ellos, como yo, luego de una etapa de incredulidad y estupefacción, hemos pasado a ira. Y no es para menos. Esta decisión del papa Francisco es una de las más graves de su pontificado y cualquier católico debería sentirse afectado ante tamaño, y evidente, desatino.

En el artículo anterior, había dicho que la existencia de Mons. Tucho como prefecto de Doctrina de la Fe sería difícil y posiblemente muy breve, porque aparecerían los carpetazos y él, necesariamente, hablaría. Y cualquiera de las dos cosas son sumamente peligrosas para su propia permanencia en el cargo. El primer carpetazo apareció de manos de una asociación americana dedicada a vigilar la actividad de los obispos en relación a las denuncias sobre abusos de menores por parte de religiosos. Y en este caso, hay que ser justos, creo que Mons. Fernández no tiene ninguna culpa y actuó correctamente más allá del trágico desenlace del caso. La única observación que podría hacerse es que nunca recibió a las víctimas. Pero lo cierto es que él nunca recibe a nadie, ni siquiera a sus sacerdotes, sino que sus contactos son siempre telefónicos o a través de redes sociales. Es decir, se resiste a los encuentros cara a cara. Podrá gustarnos poco o mucho esta costumbre, pero no puede ser vituperado por ella.

El problema es que habló. Sí; Tucho Fernández hizo sus primeras declaraciones como prefecto electo. Y creo que yo que estas declaraciones serían motivo suficiente para anular el nombramiento.

En primer lugar, en su Facebook se defendió por las “humillaciones” que recibe constantemente a raíz de su libro primogénito Sáname con tu boca. El arte de besar. Comienza diciendo que el libro “ya no existe”, lo cual es falso: los libros siempre existen; en todo caso, se agotan, pero para eso está Internet. Quienes quieran leerlo pueden descargarlo gratuitamente de aquí.

Bénédictins de l'Immaculée

REUNION DE FAMILLE

Joyeuses retrouvailles le 17 avril, pour notre Père Prieur ! Le voici avec ses deux sœurs, Sœur Marie-Hyacinthe, dominicaine, et Mère Scholastique,  bénédictine, autour de leur mère de 99 ans dont les descendants forment une famille de quatre-vingt-dix-neuf membres ­! Tous ses frères et soeurs vivants et leurs conjoints étaient présents à cet événement. Nos ferventes prières aux intentions de toute la famille, des communautés des sœurs de notre Père Prieur, et particulièrement à l’intention de leur chère maman.

DECLARACIÓN DE MONS. SCHNEIDER SOBRE LA MISA TRADICIONAL


La prohibición de la Misa Romana Tradicional es un abuso del poder eclesiástico y el incumplimiento de esta orden no constituye una desobediencia

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LA SANTA MISA TRADICIONAL LO ES TODO

Curso Anual de Formación en la Misa Tridentina

LA SANTA MISA TRADICIONAL LO ES TODO, porque TODO en ella es del TODOPODEROSO. TODO, desde el más simple y elocuente AMEN, hasta la ceremonia más sublime, es para Dios.

La Santidad de la Misa Tradicional hace vivir a los fieles y ser conscientes del pecado, la mentira, la falsedad y la traición que hay en el mundo; ahuyentando al maligno, quien no soporta tanta reverencia, respeto y adoración en las ceremonias; situándoles ante la pureza, virginidad y castidad perfectísima del Altísimo, avivando en todos el deseo de vivir esa perfección.

La Santa Misa Tradicional al ser toda de Dios, es TODO de la Iglesia. Es un verdadero compendio de la Fe católica, de las verdades profesadas por la Iglesia. El primado de Pedro, la Comunión de los Santos, el dogma del Purgatorio, el Sacrificio expiatorio de Nuestro Señor, el aumento de la Gracia, la oración de intercesión…, son verdades vividas y enseñadas en la Santa Misa Tradicional. Verdades que no varían, como no varía la Santa Misa Tradicional. Característica, ésta, esencial de la Santa Misa Tradicional, que al no poderse manipular ni alterar nos da la garantía de que las verdades que contiene permanecen ante TODO.

La Santa Misa Tradicional al ser toda de Dios, es, consecuentemente, de todo lugar y de toda época. Es universal, como universal es la VERDAD que contiene: el Sacrificio de Cordero Divino.

Al situarnos ante la Santa Misa Tradicional, ante el Sacrifico del Agnus Dei, sentimos el compromiso que adquirimos, ante tal divino Sacrificio, de la fidelidad a nuestra Fe católica recibido a través de la Tradición; la responsabilidad, al ser testigos de la Sangre del Cordero derramada y Su Santísimo Cuerpo entregado por nuestros pecados, de defender la fe de todos los ataques contra ella; y la fortaleza de que somos revestidos, que es la fortaleza del Sagrado Corazón de Jesús, cuya obra perfectísima es el Sacrificio del Agnus Dei, perpetuado en el altar hasta el fin de los tiempos.

Porque el TODO, es el TODOPODEROSO.


Los invitamos a todos a empaparse de este espíritu, el espíritu de la Santa Misa Tradicional, de su lengua litúrgica latina y de su música sacra

La nuova vita di padre Georg in Germania: «Io sono un rompiscatole, è presto per dire come sarà»


Ultime su mons. Georg Gänswein.
Sulla residenza a Friburgo: "Avevo un’alternativa?"
Luigi

Corriere della Sera, 16-7-23, di Fulvio Fiano, inviato a Friburgo in Ersigovia

«Sono arrivato quattro giorni fa, è presto per dire come sarà questa nuova vita. Devo ancora capire cosa farò». Padre Georg Gänswein sembra davvero un po’ spaesato. Dalla comunicazione dell’«esilio» impostogli a metà giugno da papa Francesco a oggi è passato un mese, ma tutto è ancora da scrivere. Lei cosa ha in mente? «Nei prossimi giorni vedrò l’arcivescovo Berger, ne discuteremo. Sono un rompiscatole — dice scherzando — nel senso che sono ingombrante, mi sono trovato in mezzo a questa situazione». Forse anche per questo, il ritorno a Friburgo, la sua diocesi, è stato circondato dalla massima riservatezza, se non dal mistero. Finora non aveva mai parlato.

Tutti lo cercano

La ricerca parte al mattino. Non è tra i sei celebranti la messa delle 7 nella maestosa cattedrale di Münsterplatz, nel giorno di sant’Ulrico, patrono della Brisgovia, quando, secondo molti fedeli che la sera prima cercavano notizie all’ufficio parrocchiale di Herrenstrasse, avrebbe fatto la sua prima apparizione in pubblico. Non è tra i mille tavolini di bar e ristoranti che pullulano di turisti e universitari, mentre i friburghesi sbirciano discreti, speranzosi di adocchiare anche questo altro illustre concittadino, oltre a Joachim Löw, l’ex ct della nazionale tedesca. Gänswein non risponde all’amico di vecchia data Joachim Roderer, che mostra fiero una foto di dieci anni fa in cui, con degli strani cappelli colorati, lui ed alcuni amici in gita a Roma ebbero, grazie alla sua conoscenza, la possibilità di incontrare papa Ratzinger.

Il mistero sulla presenza in città

Della sua presenza in città, d’altronde, non dà conferme l’ufficio stampa dell’arcidiocesi, né alla portineria del Collegium Borromaenum, dove risiederebbe, vanno oltre la concessione di poter accettare un biglietto scritto a penna da depositare nella sua cassetta privata. «Ma c’è? Lo leggerà?». «Parli con l’ufficio stampa».

Attesa e riservatezze

Ultimo indirizzo conosciuto Santa Marta, città del Vaticano, nuova residenza ipotizzata Schoferstrasse, assegnatario di un appartamento di 150 metri quadrati. Fin da quando il quotidiano Die Welt ha dato l’anteprima dell’arrivo, fioccano vane le indiscrezioni. Previsto l’1 luglio, slittato al 7, dato per certo una settimana fa (unico indizio: i cartelli di un trasloco apparsi davanti al Collegio). «Il George Clooney Vaticano torna in Germania» pregustava la Bild. «Né l’arcivescovo Berger né il vicario generale Neubrand sono stati informati», ricostruiva la Badische Zeitung. Ma padre Georg c’è, oppure no? «Ma certo, è al collegio», si lascia sfuggire un novizio, prima di essere fulminato dal suo superiore.

Esilio e polemiche

Un necessario riepilogo: papa Francesco, col quale non è mai corso buon sangue, ha congedato l’ex segretario personale di Benedetto XVI dopo 28 anni in Vaticano, riassegnandolo in Germania «per il momento». Gänswein non ha però un nuovo compito. Ha quasi 67 anni e ne mancano otto alla pensione. L’arcivescovo di Friburgo, già traballante per uno scandalo di abusi sessuali, non è autorizzato a dargli direttive, ma lo stesso vale al contrario. Una situazione senza precedenti e la loro collaborazione andrà negoziata su premesse non semplici. La Brisgovia, con 1,8 milioni di persone, è una delle più grandi arcidiocesi tedesche, ma le messe in cattedrale sono semideserte e su Gänswein, ben più tradizionalista della chiesa locale, si concentrano anche le speranze di una rinascita. Stephan Ort, teologo e caporedattore della rivista cattolica Herder, dove ha scritto anche Gänswein, ridimensiona: «È normale questa attesa per una figura così mediatica, ma non c’è un problema di doppio arcivescovo».

«Presto saprò»

È quasi ora di cena. Mentre dal Collegio defluisce l’orchestra di ragazzi, eccolo finalmente. Giacca della divisa sacerdotale appoggiata sulle spalle, accoglie un uomo all’ingresso e lo fa entrare brevemente in ufficio. Padre Georg, permette? La sua buona accoglienza all’intrusione è sincera, sembra quasi compiaciuto di avere queste attenzioni nel limbo in cui si trova: «Ho visto il suo biglietto, davvero il Corriere l’ha mandata a cercarmi? Come sa, ho promesso di tacere e obbedire».

Il colloquio informale

Le regole di ingaggio sono allora subito chiare. Chiacchierata informale, niente domande sulle polemiche, inclusa l’ultima per una cerimonia officiata sul lago di Costanza, lungo la strada del rientro. Passare dalla sacralità romana all’informalità di Friburgo dove, a messa in corso, un banchetto di rape e rabarbaro per il quotidiano mercato biologico si piazza proprio davanti l’ingresso della cattedrale, non deve essere facile.

L'incertezza sul futuro

«Friburgo è bellissima — dice senza esitare padre Georg —, ho studiato qui 40 anni fa, si vive bene. Ha visto i canali d’acqua? Sommandoli sono lunghi 60 chilometri. E poi c’è un ottimo vino, migliore di quello italiano». L’obiezione non fa in tempo a essere formulata: «Intendo il vino di qui, non tutto quello tedesco». E sull’attesa di chi spera in lei per rilanciare la diocesi? «I cittadini di qui mi conoscono meglio di come io conosca loro, vediamo». Poi fa per allontanarsi a piedi: «Mi saluti Roma e buon rientro. Chi è che sciopera negli aeroporti?». Padre Georg, dopotutto non ha perso il sorriso: «Avevo un’alternativa?».