Hijos Míos, cuando oran desde el corazón hay liberación, hay sanación,
hay purificación.
Hijos
Míos, es grande la oración. He venido como maestra de oración. He tomado sus
manos y les he enseñado a orar.
Hijos
Míos, no teman abandonarse totalmente al Espíritu Santo. Si creen verán la
Gloria de Dios.
Hijos Míos, los corazones dispuestos reciben
la ayuda del Espíritu Santo. Por eso, no teman. Que Mi Señor Me envía a Mis
hijos para orar juntos, para enseñarles, para interceder, para estar con
ustedes, y regalarles la Gracia de Amor y de Misericordia que el Padre envía a Sus
hijos muy amados.
Les amo y les bendigo. En el nombre Padre, y
del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

inundado por um mistério de luz que é Deus e N´Ele vi e ouvi -A ponta da lança como chama que se desprende, toca o eixo da terra, – Ela estremece: montanhas, cidades, vilas e aldeias com os seus moradores são sepultados. - O mar, os rios e as nuvens saem dos seus limites, transbordam, inundam e arrastam consigo num redemoinho, moradias e gente em número que não se pode contar , é a purificação do mundo pelo pecado em que se mergulha. - O ódio, a ambição provocam a guerra destruidora! - Depois senti no palpitar acelerado do coração e no meu espírito o eco duma voz suave que dizia: – No tempo, uma só Fé, um só Batismo, uma só Igreja, Santa, Católica, Apostólica: - Na eternidade, o Céu! 