En esta ocasión, se consultó sobre la posibilidad de utilizar también, con las mismas modalidades contenidas en el Motu Proprio para el Misal Romano de Juan XXIII (1962), los Misales o Rituales de las órdenes religiosas que, antes del Concilio, tenían en uso una tradición litúrgica propia. Es decir, los libros litúrgicos propios que estaban vigentes en algunas Órdenes religiosas en el año 1962.
La interesante respuesta dada por Monseñor Guido Pozzo, secretario de la Comisión Ecclesia Dei, en primer lugar recuerda que “todos los sacerdotes pueden hacer uso de los libros litúrgicos vigentes en 1962” pero “la cuestión referente al uso de los libros litúrgicos que estaban en uso en las diversas órdenes religiosas en 1962 concierne a los superiores de esas órdenes”.
Por lo tanto, se reitera una vez más que todo sacerdote, tanto del clero secular como del regular, puede usar el Misal Romano promulgado por Juan XXIII en 1962. Y se añade que es posible retomar el uso de los libros litúrgicos propios de algunas órdenes religiosas (vigentes en 1962) siempre que se cuente con la autorización de los superiores de las órdenes.
El blog Cantuale Antonianum, en un artículo sobre el tema, plantea la cuestión de a qué superiores se refiere la Pontificia Comisión Ecclesia Dei: “¿Sólo a los Superiores Generales? No parece, visto que algunos abades ya han sido autorizados por Roma a retomar el rito antiguo de su orden, y los abades corresponden, en las órdenes mendicantes, a los superiores provinciales. Pero tal vez también casas singulares, si está el permiso del superior local, puedan autorizar el uso de los libros litúrgicos preconciliares. Falta aún esta última aclaración sobre la base de los diversos niveles de superiorato”.
A su vez, el blog The Barque of Peter, donde la carta de Mons. Pozzo fue publicada originalmente, recuerda que las órdenes que gozaban de rito propio eran: los franciscanos, los dominicos, los carmelitas, los servitas, los norbertinos, los benedictinos, los cartujos y los cistercienses.
Una hermosa noticia, que nos llena de esperanza por la causa de la Santa Misa ya va adelenatando. Dios sea loado.
fonte:Dio con nosotros